Os presentamos a la podenca más afortunada de la Nochebuena del 2018: BIMBA, nacida aproximadamente en enero de ese mismo año, vagaba sin rumbo y sin fuerzas por una carretera sevillana, a oscuras bajo el frío azotador del invierno. No sabía que su vida estaba a punto de cambiar por completo. La soledad y el abandono físico y afectivo quedaron atrás en un año para olvidar.

Su ángel la cogió en brazos y ya todo es de color. Como observéis en las imágenes BIMBA tiene sarna, por desgracia algo muy común entre los perros que sobreviven en la calle. Por suerte, no es contagiosa y en estos momentos recibe los cuidados y tratamientos que su piel necesita en nuestro centro de confianza La Familia de Jimena, donde día a día se recupera a pasos de gigante.

BIMBA, a pesar de todo el sufrimiento vivido, es una perrita de mirada dulce, simpática y sociable con todos. Poco a poco los miembros del nuevo hogar se van ganando su confianza. Ella es una chica lista que agradece cada mimo y caricia. Tan sólo necesita una familia que le dé la oportunidad de vivir dignamente con amor y respeto.